æáÇیÊ ÎÏÇæäÏ æ ÑÓæáÔ

El wilaiat (supervisión o gobierno) de Dios y de Su Menajero

 

Aleyas que conciernen a este capítulo:

 

 

La primera honorable aleya:

 

) ÇáäøóÈöíøõ Ãóæúáóì ÈöÇáúãõÄúãöäöíäó ãöäú ÃóäÝõÓöåöãú æóÃóÒúæóÇÌõåõ ÃõãøóåóÇÊõåõãú æóÃõæúáõæ ÇáúÃóÑúÍóÇãö ÈóÚúÖõåõãú Ãóæúáóì ÈöÈóÚúÖò Ýöí ßöÊóÇÈö Çááøóåö ãöäó ÇáúãõÄúãöäöíäó æóÇáúãõåóÇÌöÑöíäó ÅöáøóÇ Ãóä ÊóÝúÚóáõæÇ Åöáóì ÃóæúáöíóÇÆößõã ãøóÚúÑõæÝðÇ ßóÇäó Ðóáößó Ýöí ÇáúßöÊóÇÈö ãóÓúØõæÑðÇ ( .

(ÇáÃÍÒÇÈ [33] ÇáÂíÉ [6])

 

6. El Profeta está más cerca de los creyentes que ellos lo están de sí mismos. Las esposas de aquél son las madres de éstos. Los unidos por lazos de consanguinidad están más cerca unos de otros, según la Escritura de Al.lah, que los creyentes y los emigrados, a menos que hagáis un favor a vuestros amigos. Eso está anotado en la Escritura.

 La Coalición (33) (Al-Ahzâb)

 

 

La segunda honorable aleya:

 

) æóãóÇ ßóÇäó áöãõÄúãöäò æóáóÇ ãõÄúãöäóÉò ÅöÐóÇ ÞóÖóì Çááøóåõ æóÑóÓõæáõåõ ÃóãúÑðÇ Ãóä íóßõæäó áóåõãõ ÇáúÎöíóÑóÉõ ãöäú ÃóãúÑöåöãú æóãóä íóÚúÕö Çááøóåó æóÑóÓõæáóåõ ÝóÞóÏú Öóáøó ÖóáóÇáðÇ ãøõÈöíäðÇ ( .

(ÇáÃÍÒÇÈ [33] ÇáÂíÉ [36])

 

36. Cuando Al.lah y Su Enviado han decidido un asunto, ni el creyente ni la creyente tienen ya opción en ese asunto. Quien desobedece a Al.lah y a su Enviado está evidentemente extraviado.

La Coalición (33) (Al-Ahzâb)

 

 

El wilaiat o gobierno de los dotados de autoridad "ulul amr"

 

La tercera honorable aleya:

 

) íóÇ ÃóíøõåóÇ ÇáøóÐöíäó ÂãóäõæÇú ÃóØöíÚõæÇú Çááøåó æóÃóØöíÚõæÇú ÇáÑøóÓõæáó æóÃõæúáöí ÇáÃóãúÑö ãöäßõãú ÝóÅöä ÊóäóÇÒóÚúÊõãú Ýöí ÔóíúÁò ÝóÑõÏøõæåõ Åöáóì Çááøåö æóÇáÑøóÓõæáö Åöä ßõäÊõãú ÊõÄúãöäõæäó ÈöÇááøåö æóÇáúíóæúãö ÇáÂÎöÑö Ðóáößó ÎóíúÑñ æóÃóÍúÓóäõ ÊóÃúæöíáÇð( .

(ÇáäÓÇÁ [4] ÇáÂíÉ [59])

 

59. ¡Creyentes! Obedeced a Al.lah, obedeced al Enviado y a aquéllos de vosotros que tengan autoridad. Y, si discutís por í algo, referidlo a Al.lah y al Enviado, si es que créis en Al.lah y en el último Día. Es lo mejor y la solución más apropiada.

Las Mujeres (4) (An Nisâ)

 

 

El wilaiat o supervisión de los huérfanos y los débiles:

 

La cuarta honorable aleya:

 

 

) æóáÇó ÊõÄúÊõæÇú ÇáÓøõÝóåóÇÁ ÃóãúæóÇáóßõãõ ÇáøóÊöí ÌóÚóáó Çááøåõ áóßõãú ÞöíóÇãÇð æóÇÑúÒõÞõæåõãú ÝöíåóÇ æóÇßúÓõæåõãú æóÞõæáõæÇú áóåõãú ÞóæúáÇð ãøóÚúÑõæÝðÇ *  æóÇÈúÊóáõæÇú ÇáúíóÊóÇãóì ÍóÊøóìó ÅöÐóÇ ÈóáóÛõæÇú ÇáäøößóÇÍó ÝóÅöäú ÂäóÓúÊõã ãøöäúåõãú ÑõÔúÏðÇ ÝóÇÏúÝóÚõæÇú Åöáóíúåöãú ÃóãúæóÇáóåõãú æóáÇó ÊóÃúßõáõæåóÇ ÅöÓúÑóÇÝðÇ æóÈöÏóÇÑðÇ Ãóä íóßúÈóÑõæÇú æóãóä ßóÇäó ÛóäöíøðÇ ÝóáúíóÓúÊóÚúÝöÝú æóãóä ßóÇäó ÝóÞöíÑðÇ ÝóáúíóÃúßõáú ÈöÇáúãóÚúÑõæÝö ÝóÅöÐóÇ ÏóÝóÚúÊõãú Åöáóíúåöãú ÃóãúæóÇáóåõãú ÝóÃóÔúåöÏõæÇú Úóáóíúåöãú æóßóÝóì ÈöÇááøåö ÍóÓöíÈðÇ( .

(ÇáäÓÇÁ [4] ÇáÂíÉ [5 æ 6])

 

5. ¡No confiéis a los incapaces la hacienda que Al.lah os ha dado para subsistir!, ¡sustentadles de ella y vestidles! ¡Y habladles con cariño!

6. Tantead a los huérfanos hasta que alcancen la nubilidad, Cuando los creáis ya maduros, pasadles su hacienda. No la consumáis pródiga y prematuramente antes de que alcancen la mayoría de edad. El rico, que no se aproveche. El pobre, que gaste como es debido. Cuando les entreguéis su hacienda, requerid la presencia de testigos. Al.lah basta para ajustar cuentas...

Las Mujeres (4) (An Nisâ)

 

 

El wilaiat o supervisión de un esclavo:

 

La quinta honorable aleya:

ÇáÎÇãÓÉ Ü Þæáå ÊÚÇáی :

) ÖóÑóÈó Çááøåõ ãóËóáÇð ÚóÈúÏðÇ ãøóãúáõæßðÇ áÇøó íóÞúÏöÑõ Úóáóì ÔóíúÁò æóãóä ÑøóÒóÞúäóÇåõ ãöäøóÇ ÑöÒúÞðÇ ÍóÓóäðÇ Ýóåõæó íõäÝöÞõ ãöäúåõ ÓöÑøðÇ æóÌóåúÑðÇ åóáú íóÓúÊóæõæäó ÇáúÍóãúÏõ áöáøåö Èóáú ÃóßúËóÑõåõãú áÇó íóÚúáóãõæäó ( .

(ÇáäÍá [16] ÇáÂíÉ [75])

 

75. Al.lah propone un símil: un esclavo, propiedad de otro, incapaz de nada, y un hombre a quien Nosotros hemos proveído de bello sustento, del que da limosna, en í secreto o en público. ¿Son, acaso, iguales? ¡Alabado sea Al.lah! Pero la mayoría no saben.

Las Abejas (16) (An-Nahl)